El engaño de la anticoncepción y su conexión con el aborto
La Palabra de Dios
”Antes de formarte en el seno de tu madre, ya te conocía” Jer 1:5.
“¡Bendito sea Dios, Padre de Cristo, Jesús, nuestro Señor, quien nos ha bendecido del cielo, en Cristo, con toda clase de bendiciones espirituales! Cristo nos eligió antes de que se creara el mundo, para estar en su presencia límpidos y sin pecado.” Ef 1:3-4.
¿Que piensa el Espíritu Santo de la Iglesia Católica en América, en tiempos de matanzas o de grandes holocaustos como el aborto, el cual arrastra presentemente a nuestra sociedad? Nuestra actitud constituye en invitar a la mayoría de los Católicos, tanto laicos como al clero, a arrepentirse de las decisiones y de la falta de acción que han contribuido al crecimiento de este mal en nuestros países.
La muerte por medio del aborto
Cada día se practican aproximadamente 4,000 abortos en los E.U. Treinta y cinco millones [1] de fetos han sido sacrificados desde la infame decisión de Roe contra Wade en 1973 en la Corte Suprema de Justicia, en la cual, por primera vez se legalizó el aborto durante cualquier momento del embarazo. Todos los días se practican aproximadamente 1000 abortos en California, o sea, un cuarto del número nacional total de abortos, aunque California solo posea un sexto del número total nacional de nacimientos.
El fracaso político
Desde la decisión de la Corte Suprema de Justicia, millones de valientes personas han rezado, marchado, hecho campañas, predicado y suplicado para terminar la atrocidad del aborto por medios de procesos políticos y legales. Aunque hayan habido algunas pequeñas victorias, el aborto sigue siendo legal en nuestra nación. Las personas que han tratado de salvar una muchedumbre de abortos, han sido detenidas, puestos presos por largo tiempo y hasta recibido demandas afectando sus cuentas y propiedades por daños y perjuicios. Estos fondos llegan a las manos de los abortistas, los cuales son utilizados para construir más clínicas, para comprar más aparatos quirúrgicos y para practicar más abortos. Lo que parece ser muy claro es que los Cristianos en general, y los Católicos en particular, no han tenido gran influencia numérica sobre esta cuestión de manera consistente en la populación.
Comportamiento Inmoral
Considérense las estadísticas siguientes:
Aproximadamente 22% (60 millones) de la populación nacional es Católica. [2] Ahora, los sondeos sobre la práctica del aborto indican que en la populación general, las mujeres católicas son intervenidas con la misma frecuencia que esas de otras religiones. [3] ¡Aparentemente, el hecho de ser Católica no influye de ninguna manera los hechos!
En 1992, aproximadamente 44% de sacerdotes y 44% de Católicos votaron por Bill Clinton, [4] a pesar de su fuerte posición pro-aborto, la cual era bien reconocida. De nuevo, parece que ser Católico no hace ninguna diferencia. Dos veces Bill Clinton se opuso al decreto sobre el aborto por medio de nacimiento parcial. Además, 66% de los Católicos pensaron que el veto del presidente Clinton en abril de 1996, no haría ninguna diferencia en la elección en su preferencia hacia Clinton en vez de Bob Dole. Justamente después que Clinton hizo un veto del acta del aborto por nacimiento parcial, 58% de los Católicos prefirieron a Clinton, comparado a 33% de esos que escogieron a Dole y esto, a pesar de que fuese bien conocida la posición pro-vida de Dole. [5] Después de la elección de 1996, los sondeos demostraron que 53% de los Católicos quienes votaron, eligieron a Clinton. [6]
En 1998, en nuestro propio estado de California, 58% de los votos de los Católicos para Gobernador fueron dados a Gray Davis [7] aún fuese bien conocida su posición pro-elección (pro-aborto.) Desde su elección, este gobernador ha alocado millones de dólares en su presupuesto estatal para financiar al aborto. De nuevo, el hecho de ser Católico no hace ninguna diferencia. El voto Cristiano, pero no-Católico, por Davis fue un poco menor (47%) que el de los Católicos en general, pero sin embargo esto refleja un baja elección de los valores pro-vida.
En las elecciones de 1998 y 2000, la distribución de miles de volantes, folletos y guías de votación en las Iglesias y parroquias locales de Los Angeles y del condado de Orange no ha logrado mayores resultados electorales por la causa pro-vida.
El Engaño de la Anticoncepción
En resumen, para los Cristianos en general, y para los Católicos en particular, no es una prioridad votar “pro-vida”. Si 100% de los Cristianos, juntos con los Judíos, los Musulmanes, los ateos y la gente de buena conciencia quienes se opongan al aborto, votaran pro-vida, una mayoría prevalecería y los esfuerzos al nivel nacional para terminar el aborto hubiesen vencido desde hace mucho tiempo. ¿Por qué no ha pasado esto? La Iglesia Cristiana en general y la Iglesia Católica en particular, parecen demostrar una ceguera, un silencio y una apatía que niegan la resolución del dilema. A raíz del problema está el engaño de la anticoncepción y su relación con el aborto. La práctica generalizada de la anticoncepción y la creencia de que esta es aceptable no provienen de la Iglesia.
Profecías Cumplidas
La situación de los EE.UU.. está bien descrita por el Arzobispo de Denver quien escribe en su carta pastoral que se han cumplido las advertencias del Papa Pablo VI en su encíclica, Humanae Vitae. [8] Como previsto, ha habido una seria baja de la moral, una disminución de actos de procreación de la vida, una perdida del respecto general de la vida dentro de la Iglesia y de la sociedad, junto con un aumento concomitante de la eutanasia. El Papa Juan Pablo II ha notado que parece que esta decadencia es mayor en aquellos "ambientes que rechazan la enseñanza de la Iglesia sobre la anticoncepción." De hecho, en los EE.UU.. se comenzó a practicar el aborto, siguiendo la pendiente resbaladiza de la aceptación de la anticoncepción artificial.
Una Advertencia Papal
En una conferencia con los obispos de California, Nevada y Hawai, el Papa les dijo, "La enseñanza de la Humanae vitae exalta el amor matrimonial, promueve la dignidad de la mujer y ayuda a las parejas a crecer en la comprensión de la verdad de su camino particular hacia la santidad. También es una respuesta al intento de la cultura contemporánea de reducir la vida a la comodidad. Como obispos, junto con vuestros sacerdotes, diáconos, seminaristas y los demás agentes pastorales, debéis encontrar el lenguaje y las imágenes adecuadas para presentar esta enseñanza de un modo comprensible y convincente."(éfasis nuestro) Él advierte que América está en peligro de perder su alma. "Aquí está en juego la verdad indivisible sobre la persona humana, en cuyo nombre vuestros padres fundadores reivindicaron la independencia de vuestra nación. La vida de un país es mucho más que su desarrollo material y su poder en el mundo. Una nación necesita un «alma». Necesita la sabiduría y la valentía de superar los males morales y las tentaciones espirituales presentes en su camino a lo largo de la historia. En unión con todos los que promueven una «cultura de la vida» frente a una «cultura de la muerte», los católicos, y especialmente los legisladores católicos, deben seguir haciendo oír su voz en la elaboración de proyectos culturales, económicos, políticos y legislativos que, «respetando a todos y según la lógica de la convivencia democrática, contribuyan a edificar una sociedad en la que se reconozca y tutele la dignidad de cada persona, y se defienda y promueva la vida de todos (Evangelium Vitae, 90). La democracia se mantiene en pie, o cae, según los valores que encarna y promueve (Evangelium Vitae, 70). Al defender la vida, defendéis una parte original y vital de la visión que inspiró la construcción de vuestro país. Estados Unidos debe llegar a ser, una vez más, una sociedad acogedora, en la que todos los hijos por nacer, los minusválidos y los enfermos terminales encuentren amor, y disfruten de la protección de la ley."[9]
Dios ha ordenado que la Iglesia sea un faro moral para el mundo. Cuando la Iglesia (los felegrinos, los laicos y el clero) fracasa en esta misión, ésta proporciona poca orientación. En muchas parroquias las homilías sobre el mal de la anticoncepción han sido escasas durante las últimas décadas y esta mala práctica aumenta a pasos gigantescos.
La relación entre la Anticoncepción y el Aborto
La restitución de la enseñanza moral Católica del púlpito y el alejamiento de los laicos de la mala práctica de la anticoncepción artificial son de suma importancia. Se encuentran cinco factores que enlazan la anticoncepción artificial con el aborto.
Cuando uno acepta la anticoncepción artificial, uno comienza a negar la voluntad de Dios en la tarea de la pro-creación. De ésta forma, rechazamos el plan de Dios para la vida.
Si uno niega la primera vez la voluntad de Dios por el hecho de utilizar una intervención farmacológica para prevenir la concepción, es mucho más fácil la segunda vez negar ésta voluntad y practicar una intervención quirúrgica ó farmacológica para eliminar los resultados de la concepción.
La píldora anticonceptiva frecuentemente actúa como abortifaciente químico. Esto es porque ella no siempre previene la ovulación. Algunos óvulos maduran y llegan a ser fertilizados, pero la nueva vida humana en formación perece porque la píldora incapacita al útero para la implantación.
En general, las razones que las personas usan para tratar de justificar el aborto son las mismas razones utilizadas para justificar el uso de la anticoncepción.
Más de 50% de todos los abortos practicados resultan de fracasos de la anticoncepción.
Hace Falta de Arrepentimiento
En general, hace falta reformar las actitudes de los Católicos. Demasiados han caído en el engaño de la anticoncepción. Dios, quien nos ama muchísimo, espera con ganas de que nos arrepintamos. Solo cuándo esto pase, nuestras leyes e instituciones recibirán el poder para terminar el holocausto americano y así poder establecer la protección legal para el feto que va a nacer.
Rejuvenecimiento del Púlpito
Nosotros respetuosamente pedimos a los sacerdotes, y a todos aquellos asociados al sacerdocio, a dedicar una homilía completa sobre el sujeto de la anticoncepción, del aborto, de la eutanasia y sobre el respeto de la vida humana, por lo menos cuatro veces al año durante todas las misas de fin de semana. Estas enseñanzas deberán ser basadas sobre la doctrina correcta de la Iglesia y ser inspiradas por las encíclicas públicas como por ejemplo, la Humanae Vitae, la Evangelium Vitae [10] y las varias cartas pastorales del Papa y de los obispos de los Estados Unidos. Las enseñanzas tratarían sobre algunos aspectos sociales y políticos del sujeto, particularmente cuando estos elementos den importancia a la enseñanza moral y en donde se apelen a los hombres y a las mujeres Católicos a unirse en defensa de la verdad y de la vida.
Resumen
La mayoría de los adultos Cristianos en general y, en particular los Católicos, tienen que seriamente alejarse de los graves errores de la anticoncepción artificial. Ya que falta enormemente el conocimiento general de esta necesidad, la mejor oportunidad que existe para que los Católicos escuchen este mensaje es que los sacerdotes prediquen e1 arrepentimiento durante las homilías o sermones durante las misas de fin de semana. A causa del enorme tamaño del problema, hace falta proclamar este mensaje frecuentemente, por lo menos, cuatro veces al año.
Brian Murphy
El Plan de Dios para la Vida
Coto de Caza, CA
Noviembre, 2001
Referencias
[1] National Right to Life, http://www.nrlc.org/abortion/index.html; Source for statistics for 1973 through 1992: Stanley K. Henshaw, et al., Abortion Services in the United States, 1991 and 1992, Family Planning Perspectives, vol. 26, no.3 (May/June 1994), p. 101. 1994 Statistics reported in USA Today, August 14, 1996, p. A17, attributed to the Alan Guttmacher Institute.
[2] PJ Kennedy & Sons, Official Catholic Directory 1996 (New Providence, NJ: R.R. Bowker, 1996.)
[3] Stanley K. Henshaw & Kathryn Kost (Alan Guttmacher Institute), Family Planning Perspectives, vol. 28, no. 4 (July/Aug. 1966); based on an AGI survey of 9,985 women obtaining abortions in 1994-95.
[4] Exit Polls:1992, Voter News Service.
[5] Los Angeles Times poll of 1,374 adults, 1,149 registered voters, April 13-16, 1996, MOE +/-3%; Catholic sub-sample 418, MOE +/-5%.
[6] Kellstedt, L.A., J. Green and J. Guth. Paper presented to the American Political Science Association Convention, Washington, D.C., 1997.
[7] Portrait of the Electorate, Los Angeles Times, November 5, 1998. Results of an exit poll of 3,693 voters from 60 polling places across California.
[8] Humanae Vitae, Encyclical Letter of His Holiness, Pope Paul VI, “Of Human Life”, July 25, 1968, Pauline Books and Media, Boston, 1968.
[9] DISCURSO DEL SANTO PADRE JUAN PABLO II AL DÉCIMO GRUPO DE OBISPOS ESTADOUNIDENSES EN VISITA «AD LIMINA» Viernes 2 de octubre de 1998.
[10] Encyclical Letter “The Gospel of Life”, Evangelium Vitae, John Paul II to the bishops, priests and deacons, men and women religious, lay faithful, and all people of good will on the value and inviolability of human life; Pauline Books and Media, Boston, MA 1995.